¡I-M-P-R-E-S-I-O-N-A-N-T-E!. Fue en el aeropuerto de Punta Arenas. Abrigo piel de camello o de algún otro animal exótico. Traje de Armani. Zapatos de piel de lagarto, víbora o avestruz, seguramente diseñados por Manolo Blahnik, esos que cuestan 14.000 dólares. Zapatos que harían palidecer a Imelda Marcos. Anteojos Vintage con cristales orgánicos sepia degradé. Camisa Pierre Cardin y una corbata de seda al tono. Una maleta de cuero Samsonite 525 Series Epsilon y todo el fastidio de un tipo, que solamente por cortesía democrática, debe hacer la cola. Se desplazaba como un artista que quiere pasar desapercibido, con miedo a que venga un grupo de teenager y se abalancen sobre él a pedirle un autógrafo. Una autosuficiencia plena y total. Alguien de otro planeta. De otra estirpe. Invulnerable. En determinado momento aproveché el brillo de sus zapatos para alisarme el cabello. Sus ganas de pasar desapercibido contrastaba con sus ganas de ser reconocido. Su aire distante y solemne empero, alejaba a cualquier mortal de su centro ígneo. Era evidente que viajaba a la Capital para desempeñar su sacrificada labor. Por la tarde fui como siempre al Kiosco Roca, pero ya los sándwiches no tenían el mismo sabor.
viernes, 24 de agosto de 2007
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Comments
6 comments to "El mes pasado conocí a un senador"
17:42
oye hugo, y cuentame; ¿respiraba aquel dios?
19:39
Por seguro que el señor "senador cenador" no ha entrado jamás al Kiosko Roca, ni ha comido un choripán con leche con plátano
19:47
¿Y con que quería encontrarse don Milodón? estos pobres y sacrificados señores apenas ganan $11.251.284 mensuales, perdón, esa cifra es para un diputado, me faltaron dos millones más para los senadores.
15:18
La que jamásisimo te voy a creer es que el honorablísimo hijo de la recontraputissima señorissima hizo la colissima.
17:41
no paro de reir
gracias querido hugo
n.
13:28
excelente! me encanta tu humor. saludos
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