Son injustas las críticas contra el diputado Lorenzini luego de sus declaraciones acerca de que la violación a una mujer bebida no vale, sino que la víctima tiene que estar sobria y en total conocimiento de sus cabales.
Porque no es que lo traicione su deformación profesional de ingeniero comercial que sueña con ser abogado y elaborar una teoría del caso in extremis para asentar jurisprudencia y puedan ser absueltos los acusados de violación en hechos similares, sino que juega en su defensa que como bien aclaró no quiso decir lo que dijo y sus dichos fueron estúpidos, al parecer el diputado sufriría de anosognosia desconoce que sufre la afasia de Wernicke, esa dolencia que le hace decir cosas sin sentido y cree que se está expresando correctamente, casi como si no estuviera en sus cabales.
Padecer por un estado crepuscular fue lo que alegó hace unos días la defensa de la sobrina de los hermanos Vergara Toledo, asesinados en dictadura, con el fin de impedir que la joven fuera condenada por agarrar a balazos a un guardia de una sucursal bancaria y robarle su arma pero, finalmente, no prosperó pues el tribunal terminó sentenciando a la muchacha a 7 años de cárcel, mientras sus cercanos y familiares denunciaron que fue una condena injusta y un juicio político.
La Presidenta Bachelet debe disfrutar por estos días del hermoso crepúsculo en el Lago Caburgua, lo que ha sido criticado por parlamentarios oficialistas y de oposición de la zona ya que cuestionan que la mandataría vaya de vacaciones y en lo que va de corrido de su segundo mandato aún no visite oficialmente la novena región.
Pero no es que Bachelet no esté al tanto de la situación en la Araucanía, sino que a lo mejor durante su descanso hasta se anime subir al Parque Nacional Conguillio para abrazar a la Araucaria Madre imbuirse de su energía milenaria y en marzo logre llevar a buen puerto el Acuerdo de Paz que el subsecretario Aleuy tiene adelantado con parlamentarios de todos los sectores en la región y al que esperan suscriban víctimas y dirigentes políticos, sociales y económicos. Claro que entre tanto llamado a la Paz en La Araucanía, se corre el riesgo de que para algunos sectores esto les suene más como una segunda pacificación y, no vaya ser cosa, que venga con ejército pacificador incluido.
Porque no es que lo traicione su deformación profesional de ingeniero comercial que sueña con ser abogado y elaborar una teoría del caso in extremis para asentar jurisprudencia y puedan ser absueltos los acusados de violación en hechos similares, sino que juega en su defensa que como bien aclaró no quiso decir lo que dijo y sus dichos fueron estúpidos, al parecer el diputado sufriría de anosognosia desconoce que sufre la afasia de Wernicke, esa dolencia que le hace decir cosas sin sentido y cree que se está expresando correctamente, casi como si no estuviera en sus cabales.
Padecer por un estado crepuscular fue lo que alegó hace unos días la defensa de la sobrina de los hermanos Vergara Toledo, asesinados en dictadura, con el fin de impedir que la joven fuera condenada por agarrar a balazos a un guardia de una sucursal bancaria y robarle su arma pero, finalmente, no prosperó pues el tribunal terminó sentenciando a la muchacha a 7 años de cárcel, mientras sus cercanos y familiares denunciaron que fue una condena injusta y un juicio político.
La Presidenta Bachelet debe disfrutar por estos días del hermoso crepúsculo en el Lago Caburgua, lo que ha sido criticado por parlamentarios oficialistas y de oposición de la zona ya que cuestionan que la mandataría vaya de vacaciones y en lo que va de corrido de su segundo mandato aún no visite oficialmente la novena región.
Pero no es que Bachelet no esté al tanto de la situación en la Araucanía, sino que a lo mejor durante su descanso hasta se anime subir al Parque Nacional Conguillio para abrazar a la Araucaria Madre imbuirse de su energía milenaria y en marzo logre llevar a buen puerto el Acuerdo de Paz que el subsecretario Aleuy tiene adelantado con parlamentarios de todos los sectores en la región y al que esperan suscriban víctimas y dirigentes políticos, sociales y económicos. Claro que entre tanto llamado a la Paz en La Araucanía, se corre el riesgo de que para algunos sectores esto les suene más como una segunda pacificación y, no vaya ser cosa, que venga con ejército pacificador incluido.
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