Adictos a la oxitocina

Por Pepito El Breve

Más que los actuales congresistas y aquellos con temperamento aspiracional parlamentario, los indignados con los anuncios de la Presidenta Bachelet a raíz la propuesta de la Comisión por la Probidad, son los padres y apoderados de los colegios municipales ya que se prohibirá que los políticos aporten a las rifas y bingos escolares, y con lo que cuesta que los apoderados cancelen las cuotas del curso, menos asumirán los premios de los sorteos.

Quienes se verán más complicados son los apoderados de octavo año básico, ya que incluso se habían repartidos las tarjetas para el Bingo y habrá que volver a imprimirlas, lo cual es un gasto extra, porque ahora no contarán con el saco de harina, la caja de pollos y los 5 litros de aceite que son, por lo general, los tres primeros premios de los bingos donados por alcaldes, diputados y senadores. Es que la tesorera del curso tiene plata sólo para dos binguitos.

Pero lo anterior no solo afecta a los municipales también a los particulares, eso si en estos últimos a lo mejor los premios eran acciones de Penta o Soquimich y en La Girouette donde se educa la izquierda exquisita chilena quizás el primer premio era una vivienda en verde en los terrenos que vendió Caval. Pero nunca subsidio habitacional básico que ése es para los menesterosos y los gobiernos de turno lo guardan para la contienda electoral.

Como siempre ocurre nadie se hará cargo de las lagrimas de los alumnos al ver frustrados el paseo del curso y la cena de licenciatura de fin de año.

Engel y los suyos como tantas otras comisiones, cae en el error de analizar la realidad alejada del Chile real, cree ver en todo cohecho, no comprende que los políticos son adictos la oxitocina les produce un placer orgásmico ser solidarios. Y que en el marketing del siglo XXI, más que a una marca la compren se busca generar adhesiones, además que si todo hombre tiene su precio ¿por qué prohibirle vender su voto?

Algo similar ocurrirá con las donaciones y aportes reservados de las empresas a los partidos y los políticos que serán prohibidas, corriendo el riesgo de que desaparezcan varias orgánicas partidarias, constituyéndose en un atentado al patrimonio histórico y cultural de la nación, a no ser que los mecenas hagan uso de la ley de donaciones culturales para recuperarlas, después de todo la actividad política es un quehacer cultural.

Se propone que sea el Estado quien financie a los partidos y la actividad política, es decir a los operadores políticos tan vilipendiados, una suerte de capitalismo popular partidario financiado por todos.

Seriamos al fin pluralistas en todo el sentido de la palabra, se acabarían las diferencias entre izquierda, centro y derecha, todos seríamos todos o como los yankis “E Pluribus unum” (De muchos uno o unidos en la diversidad) así no importaría quién gane en las elecciones, nadie se quedaría con cola, no sé si tendría caso ir a votar.

Puesto que los padrones de los partidos están sobredimensionados la Presidenta llamó a sincerarlos, colarlos y ver si algún voto depurado queda. Cabe la duda de que si los actuales militantes serían impuros y falsos, luego de los recientes procesos electorales internos las recién asumidas dirigencias del PS, DC y UDI ¿pueden ser catalogadas de legítimas?

Como la cosa está que arde el modelo de captación de militantes adecuado sería el del Cuerpo de Bomberos con La Campaña del Sobre, en papel diamante, incluida.

O retomar esa modalidad norteamericana de mercadeo en red que en la primera campaña presidencial de Lagos con Lavín, quiso implementar Fernando Flores con sus cajas de Mercator, pero el electorado en red no funcionó, tal vez porque no existían redes sociales, y a Flores les tiraron sus boxes por la cabeza, se optó por puerta a puerta, las concentraciones y el acarreo.

Porque ya no se hablará más de políticas de reclutamiento eso suena a Dictadura Gorila y si en algo triunfó el dictador fue en hacernos creer que la política era nefasta y el hombre, a diferencia de lo que planteaba Aristóteles, es un ser apolítico plagado de virtudes; pero Pinochet se desmentía a sí mismo porque lo que él hacia era política, de simio, sucia y nada de virtuosa política.

Por último, se anuncia como obligatorio asignaturas de educación cívica para los alumnos de enseñanza básica, media y universitaria. Y para septiembre el inicio del proceso constituyente que finalice con una nueva carta fundamental, pero si los chilenos careceríamos de formación cívica, porque por algo se implementarán tales ramos como objetivos fundamentales transversales ¿qué Constitución vamos a escribir?